Tag Archives: cosmética natural

Cosmética natural: un nicho de mercado socialmente responsable

29 Dic

Los productos naturales han entrado con fuerza en el mercado cosmético. Cada día hay más consumidoras que se sienten atraídas por la alta calidad y la riqueza en activos de las formulaciones. Además, en una sociedad cada vez más concienciada con la preservación del medio ambiente y el desarrollo sostenible, los cosméticos naturales son una opción de cuidado personal respetuosa con el entorno durante todo su proceso de elaboración.

ecofriendly

Interesante nicho de mercado para invertir con responsabilidad

Cada vez hay más personas que emprenden proyectos positivos en los que vuelcan su talento y pretenden provocar cambios que, por pequeños que sean, sin duda contribuyen a mejorar la vida del planeta y de sus habitantes con el compromiso de crear una cosmética saludable, natural, que aporte belleza, estimule la juventud y favorezca el bienestar interior gracias a unos componentes excelentes y perfecta armonía en sus fórmulas.

La mayoría de empresas creadas en este nicho de mercado presentan:

  • una filosofía que transpira calidad, respeto a las personas, al medio ambiente y ecologista,
  • suelen donar parte de nuestros beneficios anuales a proyectos locales relacionados con desarrollo sostenible, de carácter social o ambiental; también algunos de sus proveedores,
  • optimizan el uso de recursos naturales, los empleados trabajan más y muy motivados porque las relaciones laborales son mejores y aumenta la confianza de los proveedores gracias a la transparencia.

Por tanto, engloban el cuidado del medio ambiente, la relación laboral con los empleados, el buen gobierno, la honestidad con los clientes y los proveedores. Persiguen una Responsabilidad Social Corporativa.

responsabilidadsocial

Dentro de la definición de Responsabilidad Social Corporativa de la Unión Europea: “La integración voluntaria por parte de las empresas de las preocupaciones sociales o medioambientales en sus operaciones comerciales y sus relaciones con sus interlocutores”.

La Tierra no es del hombre, el hombre es de la Tierra. Es muy importante que seamos ecológicos y asumamos la responsabilidad que tenemos, como habitantes de la Tierra, de protegerla y cuidarla.

cosmeticaverde
“No dudes jamás de la capacidad de tan sólo un grupo de ciudadanos conscientes y comprometidos para cambiar el mundo. De hecho, siempre ha sido así”. Margaret Mead

Montse García

Cosmética natural si pero con control y certificación

23 Dic

cosmeticanaturalconcontrol

Los consumidores cada vez están más concienciados con lo que se aplican en la piel, el medio ambiente y la ecología, por ello no paran de proliferar nuevos establecimientos especializados en esta belleza sostenible además de que los habituales van incorporando más y más firmas eco. En nuestro país, si bien está aún muy alejada de ser una potencia como Alemania o Francia, la producción nacional de belleza y tratamientos eco está creciendo.

Utilizar productos cosméticos naturales es muy saludable para la piel. Además, es una forma de colaborar con el medio ambiente porque se tiene la certeza de que el articulo ha sido elaborado en su gran mayoría con ingredientes naturales y siguiendo sistemas de producción respetuosos con el entorno.

Pero ante esta tendencia, cualquier fabricante puede anunciar su cosmética como natural sin ningún tipo de control. La propia Unión Europea ya es consciente de este problema y a través del Comité de Salud Pública del Consejo de Europa publicó una nota informativa a los consumidores sobre cosméticos naturales en la que apuntaba: “En el mercado europeo encontramos numerosos cosméticos calificados como naturales aunque frecuentemente contienen ingredientes que no son naturales. La utilización de la expresión “cosmético natural” difiere de un país a otro y pasa lo mismo en lo que se refiere a las directrices aplicables a la fabricación, la comercialización y el etiquetado. Es necesario poner a punto una definición uniforme y establecer principios directores para los cosméticos naturales en Europa”.

Actualmente en la Unión Europea no existe ninguna normativa que detalle los requisitos que debe cumplir este tipo de cosméticos. Ante la ausencia de legislación, los fabricantes de cosméticos se someten a los criterios de empresas privadas de certificación, que garantizan el carácter natural o ecológico de los cosméticos. Cada organismo certificador tiene sus propios criterios de exigencia para los productos cosméticos. Un cosmético certificado muestra el sello o logo del organismo certificador. Es posible obtener más de una certificación, y por tanto, varios sellos pueden aparecer en el mismo cosmético.

Desde 2010 existe Cosmetics Organic Standard (COSMOS), que agrupa a las cinco agencias más importantes de Europa:

  • Ecocert Greenlife (Francia)
  • BDIH (Alemania)
  • Cosmebio (Asociación Profesional Francesa de la Cosmética Biológica y Ecológica. Francia)
  • ICEA (Italia)
  • Soil Association (Reino Unido)

Además, el Institute for Marketecology (IMO), muy respetado en el campo de la certificación de productos sostenibles en todo el mundo.

En España, hay personas que dan poca credibilidad a todo aquello que tiene el adjetivo «natural o ecológico». Existe un mal uso de estas palabras, utilizándolas sin que sus ingredientes sean naturales o ecológicos en realidad y, sin certificación alguna de ello. Así, para confirmar la veracidad de ese origen orgánico existen los sellos y certificaciones oficiales. Ahora se cuida mucho más la calidad y la certificación. Estos organismos no dan su aprobación a cualquier precio ya que son muy exigentes con las empresas. En el mercado español los más habituales son los cosméticos certificados por Ecocert o Cosmebio.

Algunos dermatólogos aconsejan precaución en el uso de productos etiquetados como naturales u orgánicos para evitar complicaciones en la piel. Y, puesto que la legislación no está aún perfectamente definida, es importante que cuando compremos cualquier tipo de cosmético verde nos fijemos en sus ingredientes principales, etiquetas y la certificación. Es aconsejable evitar productos cuya procedencia no nos ofrezca las garantías necesarias para cuidar y embellecer nuestra piel.

En cosmética hay que distinguir entre natural y ecológico

Actualmente no existe en ningún país del mundo una definición oficial de lo que se considera cosmética ecológica y cosmética natural. Diversas entidades privadas empezaron a definir normas y compromisos sobre lo que debería ser un cosmético natural.

Hoy en día existen diferentes normas pero básicamente cumplen los siguientes principios:

  • Los estándares de la mayoría de asociaciones de certificación permiten usar algunos compuestos de síntesis química, puesto que no existen productos naturales que tengan sus características y sería difícil formular cosméticos sin ellos. La mayor parte de los ingredientes son naturales o de origen natural. Estamos hablando de un mínimo del 90%.
  • No se incluyen materias primas, especialmente compuestos químicos, sobre los que existen dudas sobre su inocuidad para el medio ambiente o la salud de las personas. Todas coinciden en tratar de evitar los derivados del petróleo, los perfumes y los colorantes sintéticos y las siliconas.
  • Utilizan procesos de transformación y elaboración respetuosos con el medio ambiente.
  • No están testados en animales ni el producto final ni ninguno de sus ingredientes.
  • No se admiten ingredientes ni procesos que impliquen el uso de tecnologías controvertidas como organismos modificados genéticamente (OGM), nanotecnología o irradiación.
  • Se suelen utilizar embalajes eco‐responsables, reciclados y/o reciclables.

• Estas premisas las ha de cumplir un cosmético que pretenda considerarse natural. Si además queremos hablar de un cosmético ecológico, el 95% de los ingredientes de origen animal y vegetal han de estar certificados como ecológicos según el Reglamento CE 834/2007 de producción agraria ecológica.

• Existen además cosméticos naturales que llevan un porcentaje de ingredientes ecológicos inferior al 95%. En ese caso el fabricante puede indicar qué porcentaje de ingredientes ecológicos contiene el producto.

Algunos criterios para poder escoger un producto de cosmética natural

Al no existir ningún aval de calidad, regulado por algún organismo especializado, que identifique con seguridad si un producto cosmético reúne los requisitos de producto natural tendremos que guiarnos por nuestros sentidos, vista, tacto, olfato y el sentido común.

  • Vista: la cosmética natural con productos naturales nunca presentan colores llamativos. No es pues cosmética natural la que se comercializa como tal y presenta colores. Las texturas están menos conseguidas que la cosmética tradicional por falta de productos sintéticos.
 Hemos de prestar atención a una menor caducidad de los productos ante la falta o la poca cantidad de de conservantes.
  • Olfato: a menudo algunas casas comerciales de cosmética natural nos ofrecen las estupendas ventajas de algunas «esencias» pero el aroma que publicitan como natural es sólo una composición química, sin aportar ninguna propiedad terapéutica.
  • Aval o sello identificativo de no test con animales: para identificar que en su elaboración no se han efectuado pruebas sobre animales.
  • Packaging: reutilizable.
  • El precio: los cosméticos naturales, ecológicos u orgánicos certificados puede que sean un poco más caros que los convencionales, pero la tendencia en los últimos años va siendo hacia la normalización de los precios. Es preferible no fiarse en los productos naturales demasiado baratos.
  • Composición del etiquetado: hay que leer la etiqueta y desconfíar de los productos que en su composición indiquen que es un extracto natural reconstituido, ya que implica que se ha elaborado en un laboratorio el olor o las propiedades de la planta, por ello nunca tendrán las  beneficiosas y  autenticas propiedades del principio activo natural.

Montse García

La cosmética natural es una tendencia responsable

22 Dic

ecofashion

La sostenibilidad y un estilo de vida sano y ecológico siguen en auge y las ventas de alimentos ecológicos, productos de cosmética natural y textiles ecológicos vuelven a incrementar notablemente en todo el mundo.

Así como el mundo de la moda se ha adaptado a los tiempos, desarrollando la ecomoda, la industria cosmética se suma a ella y se hace verde. Es muestra de que lo “natural” está de moda, y las marcas comienzan a lanzar líneas verdes de productos con la intención de captar a las personas que prefieren la alternativa ecológica antes que otros productos más agresivos.

La mayor parte de los cosméticos convencionales son tóxicos. La ley dice claramente que no pueden contener sustancias clasificadas como carcinógenas, mutágenas o tóxicas pero un simple vistazo a las etiquetas demuestran que no lo respetan. Su excusa es que no son peligrosas ya que los tóxicos que contienen están en muy pocas cantidades, pero hablamos de productos que muchas veces se utilizan a diario y, por tanto, la cantidad de sustancias perjudiciales que termina entrando en nuestro organismo es elevado.

Los productos de cosmética natural son tendencia. Y es que, lo natural se impone en todos los aspectos de la vida. La decoración, la gastronomía o la moda se han sumado a la lucha por un mundo más sostenible apostando por productos cada vez más naturales y eco friendly.

Los productos de cosmética natural son una alternativa a la cosmética convencional o tradicional. Hoy en día la oferta de productos creados a partir de ingredientes vegetales y que no contienen (o casi no contienen) aditivos químicos, ni fragancias sintéticas, es más amplia.

La cosmética natural ha evolucionado para alcanzar una posición privilegiada dentro del mercado de la belleza. Éste es un interesante nicho para invertir en un negocio, con la filosofía de cuidar la piel y el medio ambiente al mismo tiempo.

mujeresecofriendlyLo natural está en alza. Lo natural se ha convertido en sinónimo de saludable y sostenible.

El hecho de que sean productos respetuosos con el medio ambiente y que no hayan sido testados en animales envuelve a la compradora de cierto aire “ecologista” que también anima a la compra.

Los productos naturales han entrado con fuerza en el mercado cosmético. Cada día hay más consumidoras que se sienten atraídas por la alta calidad y la riqueza en activos de las formulaciones. Además, en una sociedad cada vez más concienciada con la preservación del medio ambiente y el desarrollo sostenible, los cosméticos naturales son una opción de cuidado personal respetuosa con el entorno durante todo su proceso de elaboración.

cosmeticanatural

 

Montse García

Criterios de certificación de la cosmética natural

10 Ago

La creciente demanda por lo verde ha revolucionado la cosmética. Las firmas naturales van más allá y ya no se contentan con poseer tan sólo composiciones naturales. El packaging, las fórmulas y los compromisos medioambientales son referencias indiscutibles para vender naturaleza cosmética.

Con el mercado de lo ecológico, biológico y natural en plena expansión, numerosas firmas se sirven del término natural cuando los productos contienen pocos ingredientes naturales y aún menos ecológicos. El segmento de los consumidores ecológicos es muy atractivo para las empresas de cosmética dedicadas a un sector con mucha competencia y muy poco regulado.

El problema es que no hay ninguna norma o ley que especifique qué productos cosméticos pueden considerarse naturales y cuáles son los criterios a tener en cuenta. El Reglamento Europeo que regula la producción agraria ecológica sólo se refiere a productos alimentarios y deja fuera a cualquier proceso que, aunque utilice materias primas procedentes de la agricultura o la ganadería, no tenga como objetivo la producción de alimentos. Por tanto cualquier fabricante puede anunciar su cosmética como natural sin ningún tipo de control.

La propia Unión Europea ya es consciente de este problema y a través del Comité de Salud Pública del Consejo de Europa publicó una nota informativa a los consumidores sobre cosméticos naturales en la que apuntaba: “En el mercado europeo encontramos numerosos cosméticos calificados como naturales aunque frecuentemente contienen ingredientes que no son naturales. La utilización de la expresión “cosmético natural” difiere de un país a otro y pasa lo mismo en lo que se refiere a las directrices aplicables a la fabricación, la comercialización y el etiquetado. Es necesario poner a punto una definición uniforme y establecer principios directores para los cosméticos naturales en Europa”.

Actualmente en la Unión Europea no existe ninguna normativa que detalle los requisitos que debe cumplir este tipo de cosméticos. Ante la ausencia de legislación, los fabricantes de cosméticos se someten a los criterios de empresas privadas de certificación, que garantizan el carácter natural o ecológico de los cosméticos. Cada organismo certificador tiene sus propios criterios de exigencia para los productos cosméticos. Un cosmético certificado muestra el sello o logo del organismo certificador. Es posible obtener más de una certificación, y por tanto, varios sellos pueden aparecer en el mismo cosmético.

Control en otros países europeos

La respuesta de las empresas más consolidadas y prestigiosas de la cosmética natural ha sido agruparse y trabajar con organismos de control ya existentes y dedicados a la certificación de productos ecológicos o biológicos para establecer unas normas y un sistema de control específico para los productos cosméticos.

Los principales organismos certificadores europeos son Ecocert y Cosmebio en Francia, BDIH en Alemania, Demeter o Soil Association en el Reino Unido.

Los criterios utilizados por las estar entidades para otorgar su certificación son muy similares y existe, incluso, el deseo de llegar a una armonización de estos cinco referentes que pueda ser utilizada en Europa.

En la actualidad, algunas de estas asociaciones europeas están trabajando para establecer unos estándares comunes en el proyecto COSMOS-standard (www.cosmos-standard.org).

Seguir leyendo

La cosmética natural vende

10 Ago

Los  Departamentos de Marketing, Creativos y Publicistas saben que la palabra “natural” vende.  Les ayuda a justificar cualquier sobreprecio, porque para los cosméticos y productos de higiene todavía no existe una norma oficial que evite fraudes y engaños.

El problema es saber qué productos son verdaderamente naturales o que grado o porcentaje de pureza poseen. Por ello, han surgido a lo largo de los años organismos privados de medición, a falta de una legislación gubernamental mundial o europea (en el próximo post explicaré el tema de certificación).

Distinguir los auténticos productos naturales o ecológicos de los que no los son y que se publicitan como tales, es una tarea que en ocasiones puede resultar difícil, puesto que no existe una normativa unificada.  Los consumidores nos podemos basar en algunos parámetros, tales como:

  • No tienen la misma presentación, textura, color y olor en cosméticos naturales que en la cosmética convencional. Se producen cambios en las materias primas que la componen que siempre están variando en composición, textura o color.
  • Los cosméticos naturales deben estar compuestos, en un porcentaje superior al 90%, por materias primas naturales de origen no animal (vegetal o mineral). Un Cosmético natural según certificación Ecocert es el que reúne las siguientes condiciones: un mínimo del 95% del total de los ingredientes (incluyendo el agua) es natural o de origen natural. Como máximo el 5% restante pueden ser ingredientes de síntesis (éstos forman parte de una corta lista restrictiva que incluye algunos conservadores y sustancias auxiliares). Como mínimo el 5% del total de los ingredientes procede de agricultura biológica, que representa como mínimo el 50% de los ingredientes vegetales. Por lo tanto, un buen sistema discriminatorio es fijarse en los INGREDIENTS y en sellos que certifican es un cosmético natural.
  • No deben contener sustancias dañinas para la piel ni para la salud del usuario, eso incluye también las materias primas naturales que puedan ser irritantes, tóxicas o peligrosas.
  • Los cosméticos naturales, se conservan con sustancias mucho más suaves y naturales que a un producto conservado con química. Por lo tanto la vida media del cosmético es menor.
  • En cosmética natural, los perfumes artificiales no son admisibles teniendo la alternativa de los esenciales puros que pueden dar un aroma sano y natural. Tampoco son admisibles reconstituidos y aromas idénticos a naturales, que pueden llegar a ser 100 % artificiales.
  • Los cosméticos naturales no deberían ser experimentados con animales. No debería asociarse a ningún tipo de tortura o sufrimiento hacia los animales para conseguir materias primas (productos apícolas, esencias de animales, materias grasas, etc.).
  • Sus consumidores valoran más el contenido que el continente, les interesan más el efecto del producto que su presentación. Por eso no necesitan colorantes químicos ni modificadores del aspecto externo (textura, densidad, etc.).
  • La cosmética natural es respetuosa con el entorno y el medio ambiente. El uso de envases y embalajes reciclados y/o reciclables debe ser un punto importante a tener en cuenta.
  • La cosmética natural se basa, sobre todo, en el empleo de plantas y sus extractos. Debería ser un motor económico que potencie la agricultura ecológica y el comercio justo con los países productores de ciertas plantas. También, una posibilidad de potenciación económica de zonas deprimidas con grandes recursos naturales, potenciando cultivos autóctonos sostenibles, ecológicos y rentables.
  • La cosmética natural es  una forma más natural de cuidar nuestra salud, higiene y belleza, más armoniosa con nosotros y con el planeta, más consciente.

Diferenciaciones y consideraciones a tener en cuenta:

  • Un ingrediente natural: es aquel vegetal, animal, mineral o componente marino que es un extracto directo no transformado obtenido de la producción agrícola o mediante un procedimiento físico.
  • Un ingrediente de origen natural: es el que procede de la naturaleza y ha sido transformado mediante procedimientos respetuosos con el medio ambiente.
  • Agricultura ecológica: es aquella que se basa en la utilización óptima de los recursos naturales sin emplear productos químicos de síntesis u organismos genéticamente modificados (OGM) —ni para abono ni para combatir las plagas—, logrando así productos orgánicos mientras se conserva la fertilidad de la tierra y se respeta el medio ambiente.
  • Los términos ecológico, biológico u orgánico significan lo mismo. Por otro lado, cuando hablamos solamente de cosméticos naturales, éstos no han sido necesariamente obtenidos por métodos ecológicos (ver criterios de certificación).

Los cosméticos naturales deben ser una alternativa a los convencionales, aportar las mismas o mayores ventajas potenciando el uso de sustancias vegetales, y no un simple argumento de Marketing verde.

Aconsejo lectura del artículo: Certificación cosmética natural

Montse García

Marketing y Comunicación integral

@modernmarketing